¿Cuáles son las áreas de mayor exposición al cambio climático para la biota terrestre en Cuba?
En el contexto del cambio climático se entiende por Vulnerabilidad a la magnitud en la cual una especie es amenazada con declinar o reducir su valor adaptativo, perder diversidad genética o extinguirse, producto de los efectos del cambio climático. Uno de los componentes de la vulnerabilidad es la exposición, que se refiere a la magnitud de cambio que probablemente experimente una especie o localidad y dependerá de la tasa y magnitud de las anomalías ambientales asociadas al cambio del clima. Una de las vías más frecuentes para evaluar la exposición es el uso de modelos de circulación global y el empleo de modelos de nicho ecológico.
Basado en la sumatoria de los modelos de nicho de 402 especies endémicas de flora y fauna terrestre, se estimó la distribución espacial de la riqueza de especies potencial para el periodo actual y dos escenarios de cambio climático para el 2050. Como se muestra en la siguiente figura, la riqueza no se distribuye de manera homogénea a través del archipiélago, destacándose las regiones de mayor elevación como las áreas con los mayores valores de riqueza potencial. Esto es consistente con la distribución conocida de la biota cubana, donde las zonas montañosas albergan la mayor diversidad, debido a fenómenos biogeográficos históricos y la presencia de una mayor diversidad de hábitats. La proyección de los modelos muestra notables variaciones en los patrones de riqueza, sobre todo asociados a la pérdida de áreas de idoneidad climática en la mayoría de las especies. Un análisis estimó que para el escenario de alta emisión podría ocurrir una notable reducción de la riqueza en zonas de la región occidental. Además, áreas con una riqueza superior a 150 especies se concentran en aproximadamente 4 860 km2, limitados a las regiones de mayor elevación del centro y oriente de Cuba.
Distribución de la riqueza potencial de especies en la actualidad (A) y en dos escenarios de cambio climático: mitigación (B) y alta emisión (C) para el período de 2050, basado en la sumatoria de los modelos de nicho climático de 402 especies de flora y fauna endémicas de Cuba.
La exposición al cambio climático se estimó como el porcentaje de cambio en la riqueza de especies; o sea se estimó la pérdida o ganancia de la riqueza futura respecto a la riqueza estimada para la actualidad. Las zonas más expuestas serían aquellas donde ocurran los mayores porcentajes de cambio. Para representar espacialmente la exposición se calculó y representó el valor medio en una retícula de celdas hexagonales (cada celda = 100 km2).
La siguiente figura muestra la distribución de la exposición en un escenario de mitigación y en otro de alta emisión. Los mayores valores se encontraron asociados a llanuras o regiones de baja altitud. En el escenario de mitigación se estima que las regiones que podrían perder más de 50 % de su riqueza potencial se encontraron asociadas principalmente a las llanuras, como la de Zapata, Colón, Júcaro, del Cauto y del sur de Camagüey, así como el archipiélago Jardines de la Reina. En el escenario de alta emisión, además de las regiones antes mencionadas, se aprecian altos valores de exposición en la vertiente sur de Cuba occidental, como las llanuras del sur de Pinar del Río y la de Artemisa, gran parte de Cuba central y centro-oriental, como las llanuras de Maniabón, Nipe y Sagua de Tánamo. En este último escenario, todos los archipiélagos que rodean la isla de Cuba se encuentran entre las zonas de más altos valores de exposición.
Distribución del índice de exposición al cambio climático en escenarios de mitigación (A) y de alta emisión (B) para el horizonte temporal de 2050. La exposición se estimó como el porcentaje de cambio en la riqueza de especies respecto a la actualidad. Los valores fueron calculados para cada celda hexagonal (100 km2) en base a los modelos de nicho de 402 especies de la biota. Nótese que en ambos escenarios los menores porcentajes de cambio se encuentran asociados a los macizos montañosos.